El Poder del Pleno Compromiso
Acerca del autor: Los autores, fundadores y ejecutivos de LGE Perfomance Systems, un programa de capacitación ejecutiva basado en programas de entrenamiento atlético, ofrecen un programa dirigido a personas estresadas que desean encontrar más propósitos en su trabajo y formas de manejar mejor sus propios niveles de energía. "Equilibrar el estrés y la recuperación es fundamental, no sólo en los deportes competitivos, sino también en el manejo de la energía en todas las facetas de nuestras vidas. La profundidad emocional y la capacidad de recuperación dependen de la participación activa de los demás y de nuestros propios sentimientos".
Este libro nos enseña a cómo buscar nuestra máxima productividad, para ello nos dice que debemos controlar y mantener al máximo nuestra energía y para poder tener la energía necesaria para poder llevar a cabo nuestros cometimos no debemos descuidar aspectos como los hábitos y las rutinas, la energía, el descanso y la recuperación.
Estos autores demuestran que la clave para lograr objetivos y rendir al máximo no radica en la administración del tiempo sino en algo mucho más poderoso: la administración y el balance de la energía. Para ser una persona realmente eficiente y contribuir con tu trabajo, tu familia y todos tus objetivos tienes que aprender a evaluar y entender tus niveles de energía.
Todos tenemos la misma cantidad de tiempo en nuestro día, tenemos las mismas 24hrs y los mismos 1440 minutos y por lo general esto no es suficiente para lidiar con todas nuestras responsabilidades, sin embargo, hay personas que logran hacer mucho más en este periodo de tiempo. Entonces ¿qué es lo que tiene este grupo de gente que le permite cumplir con múltiples objetivos diarios?
Vivimos en una sociedad obsesionada con el tiempo, si algo no funciona la gente piensa que dedicándole más tiempo puede comenzar a funcionar, por ejemplo, si un estudiante no entiende algo el consejo normal sería que pasara más tiempo estudiando. Pero hay un problema, el tiempo es una variable fundamentalmente limitada, el verdadero crecimiento no viene al aumentar la cantidad del tiempo lo que realmente hay que aumentar es la calidad del tiempo. Para lograr ser individuos que vivamos una vida óptima tenemos que entender que para mejorar es inútil simplemente aumentar el número de horas que pasamos en una actividad, sino que lo importante es entender como alinear nuestros niveles de energía con tiempos de calidad y de esta manera maximizar todos nuestros resultados.
Nuestro cuerpo y nuestra mente están ligados de manera natural a un funcionamiento oscilatorio, es decir, que no puedes tener un pico de energía durante todo el día, más bien hay un comportamiento rítmico entre actividad y descanso, tenemos que dejar de ver nuestro día como un elemento lineal y comenzar a verlo como un elemento cíclico que va guiado por un ritmo; esto es lo que tienes que entender a pesar de lo que dicte la sociedad. No puedes correr a máxima velocidad durante una hora y tampoco puedes estar absolutamente concentrado durante cuatro horas, tenemos una cantidad limitada de energía y para lograr los mejores resultados tienes que saber cómo utilizar y cómo llenar este tanque. Un balance entre intensa actividad e intenso descanso te dará el equilibrio que necesitas para rendir al máximo cuando la ocasión lo demande. Tu día tiene que ser una serie de intensos periodos de acción acompañado de intensos periodos de recuperación. Recuerda entrar en el ciclo de tu día y ordenarlo para cumplir con tus demandas de energía.
El objetivo es que logres entrar en un ritmo de periodos completamente ocupados y luego periodos estratégicamente desocupados. En este mundo que celebra y recompensa el trabajo y la actividad es importante que también reconozcamos la recuperación y renovación de energía para que puedas vivir una vida de alto rendimiento. Tienes que entender estos dos principios: demasiada actividad sin recuperación lleva al agotamiento, demasiada recuperación sin actividad lleva a la atrofia. Podemos utilizar el ritmo ultradiano como referencia, siguiendo este ciclo la actividad intensa se realiza en periodos de 90 minutos, aquí es donde descargas toda tu energía durante 90 minutos todos tus niveles se encuentran al máximo, tu concentración, tu resistencia y tu creatividad se encuentran en su mayor punto. Pero esta progresión tiene que estar acompañada de un descanso intenso, por lo que durante 20 minutos tu cuerpo y tu mente necesitan tiempo de descanso y recuperación en donde puedas renovar tu energía.
Programa tu día en función a este ciclo y comienza a ver los resultados, recuerda que durante tus 20 minutos de reposo eres libre para descansar y reponerte como mejor te parezca, pero una vez terminado prepárate para entrar a 90 minutos de pleno compromiso!
Jim Loehr descubrió este principio al observar a sus clientes, principalmente los tenistas profesionales, ya que había jugadores que resaltaban de manera sorprendente sin embargo no entendía que era lo que los diferenciaba. Por ello, separó a estos clientes en dos grupos los de alto rendimiento con grandes logros y los de bajo rendimiento con resultados mediocres, ambos grupos contaban con grandes habilidades atléticas, todos estudiaban estratégicamente el juego del tenis y le dedicaban la misma cantidad al entrenamiento diario. No había ninguna diferencia aparente, pero después de mes de análisis Jim pudo por fin observar qué era lo que los diferenciaba: los jugadores exitosos oscilaban entre cada punto y cada set, se desconectaban, se sentaban, bajaban sus hombros, relajaban su cuerpo y se quedaban viendo al vacío. Después de esto Jim estudió los ritmos cardiacos de estos jugadores y se dio cuenta de que, de manera consciente o inconsciente, los jugadores de alto rendimiento habían integrado momentos de reposo absoluto en donde su energía se renovaba y podían ingresar a cada punto con mayor potencia; esto claramente les daba una ventaja sobretodo al final de un partido. En conclusión, es en este punto en donde reside la fundamental ventaja del grupo de alto rendimiento, saber cuando estar plenamente comprometidos y cuando estar plenamente en recuperación.
El libro nos explica acerca de la fuente de energía dividida en cuatro partes cada una siendo una fuente particular que hay que aprender a desarrollar y renovar:
1º Energía Física
Es decir, todo lo que está ligado a tu cuerpo, tu alimentación, tu salud, tu condición física, tus periodos de sueño. Debemos hacernos estas preguntas: ¿haces ejercicio regularmente?, ¿duermes lo suficiente y con un sueño de calidad?
2º Energía Emocional
Es decir, todo lo que está relacionado a tus emociones, tu inteligencia emocional, tu estado emocional durante el día, tu relación con emociones negativas. Debemos hacernos estas preguntas: ¿sientes emociones positivas regularmente?
3º Energía Mental
Es decir, todo lo relacionado con tus capacidades cognitivas, tu concentración, tu retención, tu creatividad, tu autocontrol. Debemos hacernos estas preguntas: ¿eres capaz de concentrarte durante períodos prolongados de tiempo?, ¿o estás perdiendo el enfoque rápidamente y te distraes?
4º Energía Espiritual
Es decir, todo lo que está relacionado a tu propósito en la vida, tus valores, tus ideales, tu misión y tu contribución. Debemos hacernos estas preguntas: ¿cómo está tu motivación?, ¿tienes un propósito en la vida?, ¿y un conjunto claro de valores que impulsan tus acciones?.
Cada uno tiene que evaluarse de manera individual, si tu nivel en estos tipos de energía es bajo, tú eres el único responsable de aumentarlo, debes hacer una evaluación honesta de tu situación actual.
Esto te dará las herramientas para saber qué es lo que tienes que trabajar para estar completamente comprometido durante tu día, tienes que estar energizado físicamente, conectado emocionalmente, enfocado mentalmente y alineado espiritualmente con un propósito más elevado que tus propios intereses.
La energía física es nuestra fuente más evidente de energía, sin este tipo de energía no podríamos hacer absolutamente nada. Si estas todo el tiempo cansado probablemente tengas que elevar esta energía. Existen tres pilares para elevar tu energía física: el primer punto es ejercicio y respiración, trata de hacer alguna actividad física por lo menos 30 minutos al día, salir a correr siempre es una buena opción, en cuanto a la respiración haz ejercicios para respirar profundamente que te permitan expandir tu capacidad pulmonar. El segundo punto es dormir bien, prepara un ritual antes de ir a la cama que te ayude a dormirte más rápido y aliviar todas las preocupaciones del día, para un adulto lo ideal es que puedas descansar entre 7 y 8 horas. Y el tercer punto es nutrición saludable, durante un día come de 5 a 6 pequeñas porciones de comida saludable y toma 2 litros de agua al día. Porque cuanto mejor te nutras, duermas bien y cuides tu cuerpo con ejercicio más energía física tendrás a tu disposición.
La energía emocional está ligada a todas las emociones que experimentamos durante nuestro día. Para que puedas rendir a tu nivel óptimo tienes que desarrollar la capacidad de acceder a tus emociones positivas, el sentir entusiasmo, interés y alegría te permitirá elevar tu energía emocional. En cambio, las emociones negativas que están ligadas a una inestabilidad tóxica, por ejemplo: miedo o preocupación, ansiedad, …, pueden afectar negativamente a este tipo de energía. Las emociones positivas que generas alimentan todas tus actividades, si tu día está lleno de emociones negativas puedes notar que te están drenando de energía. Lo que tienes que hacer es comenzar a:
- Explorar: qué actividades puedes integrar a tu día que te hagan feliz
- Programar: estas actividades y hacerlas de manera disciplinada
- Ejecutarlas: de manera diaria para elevar tus emociones positivas
- ¿Si no funciona? Regresa al paso numero 1 y vuelve a buscar nuevas actividades
Estos pequeños momentos donde te irradias de emociones positivas son esenciales para renovar tu energía emocional.
La energía mental está relacionada a la habilidad para concentrarse al 100% en lo que estás haciendo, para poder entrar a un estado de completo compromiso tienes que desarrollar la habilidad de estar atento, esta capacidad de enfocarte como un rayo láser en lo que quieras, cuando quieras y la cantidad de tiempo que quieras, la concentración es una de las habilidades más importantes que puede desarrollar. Si te distraes fácilmente o simplemente te cuesta mucho trabajo poner atención significa que tienes que aumentar tu energía mental. Cuidado con ciertas redes sociales que están diseñadas para desviar tu atención lo más posible y limitan tu capacidad para enfocarte en algo durante largos periodos de tiempo.
Este libro define la energía espiritual simplemente como la fuerza que te lleva a la acción, esta energía es la motivación que te lleva a actuar de una manera en particular podrías tener toda la energía física, toda la energía emocional y toda la energía mental sin embargo sin un propósito definido tendrás grandes dificultades para mantener tus acciones durante el tiempo. Mucha gente se cuida físicamente, tiene un buen trabajo, sin embargo, la motivación es esporádica, al no tener un sentido de propósito es extremadamente difícil contar con una motivación constante. ¿Cual es la razón por la que te levantas todos los días?, ¿qué es lo que hace que salgas de tu cuarto? Cuanto más clara y precisa sea tu respuesta más fácil podrás navegar en esta vida, cuando tienes una razón para existir, cuando tienes una visión final tan elevada que en toda tu vida nunca alcanzarás es en ese momento cuando encuentras tu propósito.
La energía espiritual proviene de 2 fuentes: tu propósito en la vida y los valores que te componen. Encontrar estos dos elementos en tu vida no es tarea sencilla, a lo mejor te toma meses o años, sin embargo, los autores de este libro desarrollaron un ejercicio para acelerar el proceso y encontrar tus valores. Haz este ejercicio con toda honestidad y apertura, busca un momento de tu día donde nadie te moleste y enfócate en indagar en tu propia mente. Imagina el final de tu vida, estás recordando todo lo que viviste, ahora piensa en las 3 lecciones más importantes que aprendiste y describe porque son tan importantes, luego piensa en la persona que más respetes, una persona que realmente admiras, describe las tres cualidades que más te impresionan de esa persona; tercero describe qué tipo de persona eras cuando estabas en tu mejor versión, qué virtudes proyectabas en tus mejores momentos y por último piensa en tu lápida, qué te gustaría que estuviera escrito en ese pedazo de piedra, cómo te gustaría ser recordado. Este ejercicio puede parecer difícil y lo es, estas preguntas son complicadas de responder, pero para elevar tu energía espiritual y reconectar con tu propósito y tus valores tienes que cuestionarte profundamente esos elementos.
Recuerda las cuatro fuentes de energía: física, emocional, mental y espiritual; comienza a programar rutinas poderosas durante tu día, apunta qué es lo que vas a hacer, cómo lo vas a hacer y para qué lo vas a hacer. Notarás que este simple ejercicio que consiste en escribir tus objetivos en un diario te permitirá comprometerte a un nivel más profundo con tus rutinas, establecer hábitos poderosos que alimentan tus fuentes de energía y seguir caminando hacia una calidad de vida más elevada.
Yo también he estado antes en el lugar que estás tu ahora. Cuando empecé con mi sueño de montar mi propia Clínica Médica y era el Director Ejecutivo, no sabía cómo cumplir con mis responsabilidades en el trabajo y estar a la vez presente en casa con mi familia. Sin embargo, después de hacer cambios en mi productividad, establecimiento de objetivos y liderazgo, pude llevar a mi empresa hacia adelante superando una recesión económica en la que estaba inmerso el país y obtener resultados positivos; y todo ello mientras llegaba a casa a tiempo para cenar con mi familia cada noche.
Ahora enseño los mismos principios que ayudaron a mi liderazgo, junto a mi equipo, aquí en CIME Academy.
Si quieres conocer más acerca de nuestra propuesta de formación en medicina estética te animamos a que te pongas en contacto con nosotros. Resolveremos tus dudas y te asesoraremos en lo que necesites.
Dr. Manuel Rubio Sánchez
Médico Estético